La magia con velas quizás
sea la forma de magia a la que más estamos acostumbrados socialmente. Es más,
ni siquiera pensamos si creemos o no en la brujería, este tipo de magia está
tan metida en nuestra vida que lo hacemos casi sin darnos cuenta: los tres
deseos al soplar las velitas en nuestro cumpleaños, encenderle la vela a un
santo para pedir un favor, o tan solo prender alguna vela para una velada romántica
o para armonizar el ambiente; son algunos claros momentos en que hacemos magia
con velas cotidianamente. Pero en este texto vamos a hablar más que nada de la
magia con intención, el utilizar conscientemente las velas con un propósito mágico. Escribo estas
palabras y me suena a que alguien puede pensar que va a ser muy difícil la tarea de hacer magia con
velas, pero en realidad es mucho más simple de lo que parece.
A continuación planteo una serie de puntos a tomar en cuenta
a la hora de realizar un ritual con velas. Esto es a modo de introducción al
tema, en próximás publicaciones iremos ampliando cada punto detallado aquí.
1- PROPÓSITO:
Lo primero que
debemos plantearnos es cuál es el propósito del ritual que vamos a hacer, esto
es lo principal a la hora de hacer magia. Siempre tenemos que tener bien en
claro con qué fin vamos a utilizar la magia.
2- LUGAR:
Cuando se trata de
trabajar con velas, hay que elegir cuidadosamente el lugar de trabajo. De más
esta decir, que si vamos a mantener las velas prendidas hasta que se consuman,
no las dejaremos solas cerca de una cortina o material que pueda ocasionar algún
siniestro en el lugar (sea dentro de una casa, parque, playa, etc.) Lo mejor es
un lugar tranquilo en el que no exista mucho movimiento de personas y alejado
lo más posible de los ruidos de la calle (propongo esto no porque afecte el
ruido en algo a nuestro ritual, pero sí va a afectar a nuestra concentración)
3- ALTAR:
Cualquier cosa puede
servirnos de altar: una mesa, una caja, un cofre grande, incluso el suelo
mismo. Lo ideal es una mesa, si es bajita mejor, con un mantel sobre ella, y
precisaremos posa velas o candelabros en lo posible chicos.
4- INCIENSO:
Hay muchos autores
que plantean que el incienso no está ligado a la magia con velas, pero me apego
a las palabras de Raymond Buckland: es muy necesario. Y es necesario desde el
punto de vista en que nos facilita la concentración. Existe la creencia de que
el humo del incienso eleva nuestras oraciones a los dioses, entonces, ¿por qué
no utilizarlo para potenciar nuestro ritual con velas?
Cualquier incienso
sirve, sea cono, varita, en pasta o una mezcla de yuyos para quemar en un carbón.
5- LAS VELAS:
Llegamos al punto más
importante, las velas. Pueden utilizarse el tipo de vela que se quiera, lo más
importante es el color a utilizar. Otra cosa a tener en cuenta es el tamaño de
la misma. Si bien hay muchos rituales que se realizan durante un periodo de
tiempo determinado y se recomienda algún tamaño especifico de vela, yo
particularmente prefiero utilizar velas de tamaño pequeño. ¿Por qué mi
preferencia? Porque me gusta que la vela se consuma en su totalidad y en todo
caso si tengo que hacer el ritual varios días, preparar la cantidad de velas
necesarias desde el principio y dedicarle unos segundos más al ritual cada día.
Una vez elegido el
color de la vela o las velas, debemos prepararlas o "vestirlas". Esto
se hace ungiendo las velas con aceite. Existen varios tipos de aceites y para múltiples
usos; hay que elegir el que corresponda con nuestro propósito.
En cuanto a la
cantidad de velas que vamos a usar, eso va a depender de lo que queramos hacer.
Raymond Buckland nos plantea que para los rituales con velas se deben utilizar
4 tipos de velas, a saber: las velas del Altar, las de Ofrenda, las Astrales y
las velas del Día (esto lo ampliaré en un capítulo aparte)
6- RITUALES:
Se debe estar
preparado para cualquier suceso que nos pueda ocurrir durante el ritual.
Siempre lo mejor es preparar bien el ritual antes de llevarlo a cabo, aunque
muchas veces nos pueden suceder pequeños inconvenientes, que provoquen que
debamos cambiar algo. Si bien existen rituales muy elaborados, lo mejor siempre
es que sea algo sencillo pero con mucha intención.
7- MOMENTO:
Una vez que sabemos:
el propósito, el lugar, las velas, los inciensos, los aceites y que diseñamos
nuestro ritual; debemos elegir cuándo lo hacemos.
Aquí hay algunos
factores que podríamos tomar en cuenta pero también va a ser un tema a tratar
en una próxima entrega.
Como dije en un
principio la idea de esto fue entregarles un pantallazo de los puntos a tener
en cuenta antes de realizar un ritual con velas. Más adelante iré detallando
cada punto y les presentaré algunos rituales para ir haciendo.
Bendiciones
Shuro el Brujo